Después de más de un año buscando, al he comprado una furgoneta para camperizarla. Y lo más curioso de todo es que por caprichos del destino siempre la tuve en la puerta de mi casa.
Hay un proverbio chino que dice “Antes de cambiar el mundo, da cien vueltas por tu propia casa”. Yo lo cambiaría en mi caso por “Antes de irte lejos a buscar una furgoneta, busca en tu propio barrio”.
Incluso me he jugado la vida buscando una furgoneta en las peores zonas…
La veía casi todos los días aparcada en mi calle. Era una Ford Transit 350 Semielevada de principios de los 2000. Aunque tenía unos desgastados rótulos de una empresa de mensajería, no era ese su uso habitual, ya que pasaba la mayor parte del tiempo parada.
Un par de veces vi a una familia de marroquíes bajar de ella y descargar bártulos, pero ya por aquel entonces no me fijé demasiado: ya que no parecía estar a la venta.
Pero.. ¿por que teniendo una caravana yo buscaba una furgoneta?
La respuesta es sencilla: por comodidad.
Buscaba un vehículo que pudiese “dormir” en el gran aparcamiento público que tengo en la puerta de mi casa. Algo destinado a las “salidas express” que muchas veces hacemos. En nuestra familia el hecho de salir de camping es algo que solemos improvisar de un día para otro y con una camper aparcada en la puerta la vida es mucho más fácil.
Por el trabajo a turnos de mi mujer no disponemos muchos de fines de semana completos. Ella es enfermera y la mayoría de las veces le toca trabajar el sábado o el domingo. Y cuando eso pasa nos da mucha pereza coger la caravana para volver al día siguiente.
Para empezar nuestra caravana está en un parking a unos siete kilómetros de casa, en el cual no tenemos una plaza fija. Por eso a veces cuesta meterla y sacarla de la plaza dependiendo de dónde esté colocada (especialmente en verano a 40 grados). En esos diez minutos que tardo en enganchar bato el record del mundo de litros por minuto sudados.
Pero no siempre es enganchar y salir, sino que a veces me encuentro alguna rueda baja de presión y me toca inflarla (con lo cual estoy algunos minutos más al sol).
Luego está la llegada al camping. Después de tres años todavía no soy capaz de meterla con el coche en la parcela. Hago mis intentos y algunas veces casi lo consigo pero siempre acabamos por empujar para colocarla. Y si nos toca una parcela en pendiente o con bordillo la cosa se complica bastante.
Una vez instalados toca el montar la pérgola (el avance si no hace frio no lo ponemos), poner el suelo, sacar los trastos.. etc etc.
Para un día no merece la pena. Por eso pensé en una cámper aparcada siempre en la puerta de mi casa.
Con la furgo para un solo día no necesito cámping. Podemos ir a pasar el día lejos de casa y luego dormir allí. Podemos recorrer aquellos sitios a los que normalmente no vamos por no tener un camping cerca, sobre todo sitios de montaña.
Es la libertad absoluta ya que si no nos apetece quedarnos siempre podemos volver a casa.
Lo más curioso es que si os fijáis al lado de la señal hay una ventana… pues… !! Es la de mi casa !!
Yo en el ordenador buscando furgos en Madrid y en Barcelona y la tenia a pocos metros de mi casa. Increible.
El caso es que en las últimas semanas me había fijado en ella más de lo normal. La primera foto del artículo la tomé un mes antes de saber que se vendía (la encontré en Wallapop de casualidad hace una semana).
Llamé y resultó ser de un vecino del pueblo de toda la vida. Me comentó que la usaba para hacer mudanzas y como coche familiar pero que se le quedaba demasiado grande. Además tenía que cambiarle el embrague y no tenia dinero, por eso quería venderla.
Por si fuese poca casualidad, en el salpicadero de la furgo vi una tarjeta del taller donde llevo mi coche… le pregunté y me dijo que era de un amigo suyo y que siempre la llevaba allí, que le preguntara al taller sin problemas.
Rápidamente me acerqué a hablar con el mecánico. Llevaba un par de años reparándola y la conocía bien. Le dije.. “Dime todo lo que tiene. No me importa porque lo voy a descontar del precio.” Me confesó que había que cambiarle el embrague y el cable del freno de mano. Me ofreció además “adecentarla” un poco por fuera y limpiarla bien por dentro. Llegamos a un acuerdo y fui a señalizar la furgo.
Aun voy a tener que transformarla pues viene sin nada pero ya me he empapado de excelentes consejos en los foros, especialmente en furgowv.
En la red hay fantásticos tutoriales de como camperizar prácticamente cualquier vehículo. Ahora solo queda tener paciencia y empaparse de tutoriales. Ya os iré contando….
Ojalá me quede como esta Transit…
